Con las emisiones contaminantes del tubo de escape, los autobuses escolares de propano no pueden ofrecer el viaje sin contaminación que nuestros hijos merecen.
Nuestros hijos merecen aire limpio en el camino que hacen todos los días hacia la escuela. Eso significa cero emisiones de tubo de escape en sus autobuses escolares para que no respiren contaminantes dañinos.
Los autobuses eléctricos escolares son el único tipo de autobús escolar con cero emisiones en el tubo de escape. Eso significa que los autobuses eléctricos escolares no exponen a los estudiantes a emisiones dañinas del tubo de escape que pueden provocar asma, cáncer y otras enfermedades respiratorias.
Sin embargo, los autobuses de propano no están libres de emisiones en el tubo de escape. Si bien las emisiones del tubo de escape de propano pueden contener cantidades más bajas de ciertos contaminantes dañinos que la contaminación por escape de diésel, queremos la opción más limpia para nuestros hijos.
Veamos este tema en profundidad.
Los autobuses escolares de propano liberan emisiones dañinas del tubo de escape. Los autobuses eléctricos escolares no lo hacen.
El propano es un combustible fósil y, cuando se quema, produce contaminantes dañinos. Los autobuses eléctricos escolares son el único tipo de autobús escolar que no requiere un combustible fósil a bordo del vehículo.
Los autobuses escolares de propano emiten contaminación peligrosa a niveles generalmente comparables o superiores a los modelos de diésel actuales, según los datos de la herramienta AFLEET de Argonne National Laboratory del Departamento de Energía de EE. UU. De hecho, los autobuses escolares de propano emiten más monóxido de carbono que los autobuses escolares de diésel y la misma cantidad de gases de efecto invernadero. El único beneficio de utilizar propano en comparación con el diésel son las emisiones de óxido de nitrógeno, según lo demuestran los datos de AFLEET.
Los datos son claros: los autobuses eléctricos escolares son los mejores para reducir las emisiones que afectan la salud de los estudiantes y el ambiente.
Los autobuses escolares de propano emiten contaminación peligrosa a niveles generalmente comparables o superiores a los modelos de diésel actuales.
Fuente: Datos de AFLEET
Thomas Built Buses, un fabricante de autobuses escolares que utilizan varios tipos de combustible, presenta emisiones mediante procedimientos de prueba de la Agencia de protección Ambiental y señala que sólo los autobuses eléctricos están realmente libres de emisiones en los tubos de escape. Además, un estudio de caso de autobuses escolares de propano publicado por el Departamento de Energía de EE. UU. descubrió que, cuando se trata de calidad del aire, los autobuses escolares de propano no son mucho mejores que los modelos recientes de autobuses escolares de diésel. El reporte señaló en parte: “...[comparado con] los autobuses de diésel de 2010 o posteriores, el propano no es significativamente menos dañino para la salud o el ambiente”.
Es decir, con las emisiones de contaminantes nocivos del tubo de escape, los autobuses de propano no ofrecen el viaje sin contaminación que merecen nuestros hijos.
Los autobuses escolares de propano también emiten altos niveles de gases de efecto invernadero que impulsan el cambio climático. De hecho, la contaminación por propano es tan perjudicial como la contaminación por escape de diésel en términos de emisiones de gases de efecto invernadero. En comparación, incluso cuando se tienen en cuenta las emisiones que resultan de la producción de electricidad, en promedio los autobuses eléctricos escolares generan sólo la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero de los autobuses escolares de propano y diésel. Conforme las redes eléctricas cambian cada vez más a fuentes de energía de emisiones más bajas, esta diferencia será aún mayor con el tiempo.
De acuerdo con los datos de AFLEET, en todas las redes eléctricas del país las emisiones de dióxido de carbono por milla relacionadas con los autobuses eléctricos escolares son más bajas que las de autobuses escolares de propano. Puede encontrar más detalles sobre las emisiones en toda la red eléctrica y la comparación con los combustibles fósiles para los autobuses escolares aquí.
Es importante tomar esto en cuenta por la salud y bienestar de nuestros niños y nuestro planeta. Es más probable que los niños de hoy tengan efectos por los daños del cambio climático, por eso debemos asegurarnos de que sus viajes escolares sean en vehículos que no contaminan.
Las emisiones dañinas del tubo de escape de los autobuses escolares de propano no pueden separarse de la distribución desigual de la contaminación del aire en EE. UU. Según una nueva investigación de la Asociación Americana del Pulmón, 72 % de los residentes en los condados con la peor calidad del aire son personas de color. Las comunidades de color se enfrentan a la contaminación por partículas finas en la carretera entre un 61 % y 75 % más que los residentes blancos, según un estudio enfocado en las regiones noreste y Atlántico medio. Cuando consideramos que los estudiantes negros y los estudiantes de bajos ingresos tienen más probabilidades de viajar en autobús a la escuela que otros estudiantes, está claro que reducir las emisiones del tubo de escape es vital para un futuro más equitativo.
Conforme trabajamos para alejarnos de la contaminación dañina por escape de diésel, sabemos que la contaminación por propano no es la mejor respuesta.
Según un estudio de caso de autobuses escolares de propano, “...[comparado con] autobuses de diésel 2010 o más recientes, el propano no es significativamente más limpio.”
Como combustible fósil, el propano está cada vez más desfasado de los objetivos de cero emisiones en las flotas de autobuses escolares.
Los autobuses eléctricos escolares son la única opción que ayuda a cumplir con un mayor número de compromisos para un futuro de autobuses escolares con cero emisiones. En todo el país, los estados avanzan rápidamente para exigir cero emisiones de tubos de escape para proteger la salud de los estudiantes y las comunidades:
- Nueva York exige que todas las compras de autobuses escolares nuevos sean de cero emisiones para 2027 y que todos los autobuses escolares en la carretera sean de cero emisiones para 2035.
- La Ley de Soluciones Climáticas 2022 de Maryland exige que todas las nuevas compras de autobuses escolares sean de autobuses eléctricos para 2025, cuando se puedan usar fondos estatales o federales para cubrir los costos incrementales.
- Connecticut también aprobó la Ley de Aire Limpio de Connecticut en 2022 que exige que todos los autobuses escolares tengan cero emisiones para 2040.
- Maine aprobó un proyecto de ley de electrificación de la flota de autobuses escolares que requiere que un 75 % de los autobuses escolares nuevos no produzcan emisiones para 2035.
- California, Colorado, Maryland, Massachusetts, Nueva Jersey, Nueva York, Oregón, Vermont y Washington han adoptado completamente la norma “Advanced Clean Trucks” (Camiones avanzados no contaminantes) que establece estándares integrales de cero emisiones.
- Connecticut, , Carolina del Norte, el Distrito de Colombia, Hawái, Maine, Pensilvania, Rhode Island y Virginia han firmado un memorando de camiones de cero emisiones al 100 % y trabajan para pronto adoptar completamente la norma “Advanced Clean Trucks.”
Según nuestro seguimiento más reciente de la flota de autobuses escolares, aproximadamente un 20 % de la flota de autobuses escolares de EE. UU. está cubierta con objetivos de cero emisiones y la norma “Advanced Clean Trucks”. Muchas ciudades también adoptan objetivos de electrificación de sus autobuses escolares, como las ciudades de Boston, Nueva York, y Washington, D.C. Con estándares federales de emisiones cada vez más estrictos para camiones y autobuses, los autobuses eléctricos son la mejor opción para preparar una flota para el futuro libre de emisiones de tubos de escape. En noviembre de 2022, EE. UU. firmó un memorando de entendimiento internacional que estableció un objetivo para la venta de vehículos, autobuses y camiones de entrega comercial totalmente eléctricos para 2040.
Los autobuses de propano son una inversión riesgosa que sostiene la dependencia en los combustibles fósiles en una época con creciente impulso hacia la electrificación. Daniel Sperling, director y fundador del Institute of Transportation Studies (Instituto de Estudios de Transporte) de la Universidad de California Davis, describió las compras de autobuses escolares de propano en Boston realizadas justo antes de su objetivo de electrificación de flota como “un desvío en el mejor de los casos y un punto muerto en el peor de los casos”.
El financiamiento récord disponible para los autobuses eléctricos escolares, tanto a través del Programa de autobuses escolares no contaminantes como de otras fuentes de financiamiento federales, estatales y locales, brinda a los distritos escolares una oportunidad única de usar programas de incentivos históricos para preparar sus flotas hacia el futuro con autobuses escolares eléctricos. Puede encontrar más información sobre los programas de fondos y financiamiento disponibles aquí.